Las pequeñas dosis de ingenio que pudieron verse a lo largo de las algo más de una docena de comparsas participantes divirtieron a centenares de personas que salieron, unos disfrazados y otros no, a disfrutar de la fiesta más canalla y divertida del año. Porque en el carnaval los niños, y los no tan niños, se convierten por unas horas en aquello que más desean.
En cuanto a los premios, la comparsa 'que no nos falte de na' del colegio Juan Ramón Jiménez recibió el primer premio en centro de ensañanza, mientras que la 'Kinder Sorpresa' lo hizo en el apartado general.
El desfile, que llegó a la plaza de España desestructurado, pudo desarrollarse sin problema después de que fuera retrasado de la tarde del sábado a la del domingo por riesgo de lluvias.