El Consejo de Ministros, a petición del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, ha aprobado en su reunión de este viernes un listado de obras de emergencia para proseguir en las reparaciones de los cauces e infraestructuras dañadas durante las últimas inundaciones de primavera en toda España. Entre ellas se incluyen 2,3 millones de euros destinados a cinco actuaciones en la cuenca del Segura, que ayudarán a mantener la capacidad hidráulica y de regulación ante nuevos aumentos en los caudales y se desarrollarán en las provincias de Albacete, Alicante y en la Región de Murcia.
Tres de los embalses más importantes de la cuenca del Segura se beneficiarán de parte de la inversión que llevará a cabo la Confederación Hidrográfica del Segura, mientras que el resto del dinero se destinará a diversas reparaciones en la Vega Alta del río Segura y en el Azud de Liétor.
La partida de emergencia recoge la reparación de las filtraciones acontecidas en la ladera izquierda de la presa de La Fuensanta, al objeto de garantizar las condiciones de seguridad de la infraestructura mencionada y del embalse asociado (Albacete), el acondicionamiento de los órganos de desagüe de la presa de Camarillas, en el sistema de regulación río Mundo, al objeto de garantizar vertidos controlados que permitan minimizar los daños producidos aguas abajo de la presa (Albacete), así como la reparación de un dique del embalse de La Pedrera, que regula las aportaciones para riego y abastecimiento que transporta el acueducto Tajo Segura. El corte del suministro por el canal supondría desaguar río abajo estos volúmenes que se perderían, con riesgo de inundación río abajo. A su vez, esta avería afectaría gravemente al abastecimiento del Taibilla y a los riegos (Alicante).
La partida también incluye la reparación de las motas de protección situadas en numerosos tramos de la Vega Alta del río Segura, así como actuaciones de refuerzo de márgenes. Son numerosos los tramos en los que se ha producido arrastre de escolleras, socavaciones y otros daños en infraestructuras de riego (Albacete y Murcia), y por último el acondicionamiento del azud de Liétor, aterrado a un 80% de su capacidad. Se restituirá su función laminadora y reguladora que posibilita el abastecimiento a la población de Hellín y la salvaguarda de los bienes personales y materiales situados aguas abajo del mismo (Albacete).