Se acerca la Semana de Pasión y reconoce que le hierve la sangre. Como a otros miles de ciezanos que, con túnicas y capirotes, saldrán a las calles en muy poco tiempo a celebrar, a vivir, su Semana Santa.
¿Cuál es la Semana Santa que se encuentra cuando coge el relevo de Salmerón Pinar?
La Semana Santa que me encuentro es, en principio, la mejor. Porque me encuentro un trabajo prácticamente realizado y, nada más entrar, tenemos la suerte de que nos viene la Declaración de Interés Turístico Nacional. Me encuentro un camino recorrido, un trabajo muy bien hecho que quedará ahí para la historia. La labor de Rafael Salmerón Pinar y todos los antecesores que ha tenido la Junta de Hermandades Pasionarias ha hecho la Semana Santa.
Por hacer un paralelismo con la política, ¿Cuál es la línea que sigue su “programa electoral” como presidente de la JHP?
Aunque hay que desvincularlo totalmente de la política, mi propuesta de trabajo es el trabajo del día a día, hacer una Semana Santa mejor, mantener el legado que tenemos y bueno, siempre hay que ir mejorando y uniendo esfuerzos para que todo salga adelante.
En una palabra, ¿cómo definiría su gestión hasta el momento?
¡Hombre! Sería muy vanidoso por mi parte. Una gestión normal, como un presidente cualquiera. Sin ninguna pega. No quiero ponerle ningún otro calificativo. Sería muy vanidoso por mi parte el decir que es la mejor. No. Es una gestión corriente, con el trabajo del día a día y con la satisfacción de ver que todo va saliendo como se pide.
¿Alcanza la Semana Santa de Cieza el tope con la Declaración de Interés turístico nacional?
No, todavía no ha llegado a lo máximo la Semana Santa de Cieza. Quien se quiera parar en la Declaración de Interés Turístico Nacional creo que hace un flaco favor a la Semana Santa de Cieza. Hay que seguir luchando por ser de Interés Turístico Nacional. Llegar a un objetivo es el punto de partida para conseguir otro.
Detrás de la Semana Santa de Cieza hay más que esta declaración
Lo que más hay es dedicación, satisfacciones, muchísimo trabajo, que es algo que repito muchas veces y algo muy importante: ilusión por el día a día. La ilusión de que la Semana Santa se mantenga, progrese y siga hacia delante.
¿Cuáles son esas pistas hacia el progreso del que habla usted, ese camino que hay que seguir?
Hay que progresar en mucho, sobre todo en las procesiones. Las procesiones son para ir mejorando día a día. En cuanto a las imágenes, hubo un punto de partida hace unos años donde ya se decidió ir haciendo cada día mejor, cada vez traemos más imágenes de calidad. Esto no quiere decir que lo que haya no sea de calidad, que lo son.
¿Hace falta mayor fe entre los cofrades?
Bueno, hay de todo. No puedo conocer la fe de 4000 o 5000 personas que participan en la Semana Santa. Conocer la propia ya es difícil conque conocer la de los demás…No creo, porque hay mucha gente creyente dentro de las cofradías. Lo que pasa es que en la viña del Señor hay de todo.
En los últimos años, las distintas cofradías, también la Patrona, realizan recogidas de alimentos, actos para recaudar fondos…es una apuesta quizá cada día más fuerte por la ayuda al prójimo
Eso es lo que te decía. La Semana Santa no es solamente la Semana de Pasión, no es solamente de Domingo de Ramos a Domingo de Resurrección. Hay que trabajar en pro de otras cosas. Si la cofradía no fuese solidaria, no sería una cofradía, si la Junta de Hermandades no fuese solidaria, no sería la Junta de Hermandades. La palabra cofradía, la palabra hermandad, significa algo más, y esto se viene haciendo desde las cofradías y la junta de hermandades. Es la forma de hacer solidaridad, de hacer evangelización
¿No son las procesiones demasiado largas?
No, son cortas (Ríe). Lo que ocurre es que año tras año vamos viendo lo mismo, entonces se nos pueden hacer bastante más largas. Pero yo creo que para el cofrade, la Semana Santa y la procesión no es larga. Estamos trabajando 359 días para 6 días, no es larga, es muy corta.
Ya huele a incienso en las calles
Ya huele a flor, ya huele a azahar. Ya huele a Semana Santa.
Cuando uno vive tan desde dentro la Semana Santa, supongo que se le revuelve algo por dentro cuando llegan estas fechas
Llega la hormiguilla. Desde el prisma en el que ahora estoy, lo veo desde una responsabilidad máxima. Antes he estado de andero, de barrendero, pinchando alambres de flor…Ahora lo veo desde otro cariz, intento que todo salga bien, junto con mis compañeros, llegando a la unificación de las tareas y que eso se vea luego en la calle.
¿No se cansa de estar bajo los pasos?
Yo no. Te he dicho antes una palabra, y es ilusión. Si eso desaparece, para qué vas a venir a la Semana Santa. Teniendo ilusión no te cansas.
¿Es la Semana Santa de Cieza acaparada por una pequeña élite de poderosos?
Nunca. En la Semana Santa tiene cabida todo el que quiere trabajar para y por ella. Nunca ha sido de élite lo que ocurre es que la persona mayor es la que más tiempo ha dedicado a las cofradías y, quieras que no, es la que más se hace de ver. Pero, desde mi punto de vista te digo que el joven que venga y me diga: “Joaquín, estoy a tu lado”, bienvenido sea.
Además, ahora hay un nutrido grupo de jóvenes muy preparados en estos menesteres
Sí, por eso te digo que cualquier joven que venga y quiera aprender, bienvenido sea. No creo que nadie en Semana Santa le diga a un joven que se vaya. Soy de los que piensa que el joven de 14 años tiene que oler un poco a la madera del trono, de esa manera se hará cofrade, andero, semanasantero. Hay que luchar mucho con el ciclo de 15 a 18 años, que es donde el joven se pierde en la Semana Santa porque no encuentra su sitio. Nunca hay que decirle a un joven “no hagas esto”, es mejor llevarlo e ir enseñándole.
Porque uno se hace andero paso a paso
Lógicamente, hay que saber hacerlo todo. No se puede llegar y vestir el santo o ir a poner la flor. Son muchas las tareas que hay que aprender para llegar a ser un buen semanasantero. Hay que saber ajustar la vara, lo que hay que hacer para poner la flor,…
Y este año cumplimos 100
Todos, no solo yo. Este año cumplimos cien. Aunque anteriormente había creo que 5 hermandades ya desfilaban. Cumple cien años la organización de la Semana Santa.
Coincide también con la Coronación Canónica de la Virgen del Buen Suceso. Un año de buenas noticias para el sentir cofrade
Sí, son dos actividades distintas, lo que pasa es que se han venido a dar en el mismo año. Estaba previsto que la coronación fuera en el año 2013, coincidiendo con el 50 aniversario de la construcción de la ermita, en 1963. No pudo ser en 2013 y el señor obispo no la dio para 2014. Bienvenida sea, más trabajo hay, pero se lleva con gusto.
¿Cuánta gente trabaja directamente con usted en la concepción y el trabajo diario de la Semana Santa de Cieza?
El grupo de trabajo nuestro lo formamos 10 personas. Pero no hay que olvidar que esos 10 llevan a gente con ellos. Y las cofradías también están allí, y también trabajan en pro de esa Semana Santa, no hay que olvidarlo. La junta lo que hace es organizar, quiénes hacen la Semana Santa son las cofradías. El trabajo duro, duro recae en ellas.
Para alguien que no tenga ni idea, ¿cuál es el trabajo, a grandes rasgos, de la Junta de Hermandades Pasionarias?
¿El trabajo? De todo. ¿Qué quieres hacer? Esa sería la pregunta. ¿Quieres organizar una procesión?, ¿Leer?, ¿Quieres escribir? ¿Hacer radio? Hay de todo y hay para todos. Luego también tenemos la procesión de la Virgen, que es donde la Junta de Hermandades fuese una cofradía, aunque colaboran todas las cofradías.
Se es cofrade todo el año
Es todo el año. Hubo un vídeo en el devenir de la revista de El Anda, en el que se catalogó a la Semana Santa de abril a marzo, con eso te lo digo todo. Ese es el eslogan.
¿Cuál es su primer recuerdo de la Semana Santa de Cieza?
¿El mío? Cuando era de la remolacha de los Dormis y cuando era de la remolacha de La Dolorosa. Mantengo con orgullo el decir que he sido Dormi y que estado en esa remolacha con los que ahora son compañeros de la Junta Directiva y presidentes.