La película está dirigida por el director francés, Luc Besson, y protagonizada por Scarlett Johansson y Morgan Freeman.
En Lucy, Johansson da vida a una mujer obligada a ejercer de mula (de drogas) y que adquiere poderes sobrenaturales cuando la bolsa de la droga se rompe y los narcóticos entran en contacto con su cuerpo. Entonces se convierte en una máquina de matar, adquiere una memoria prodigiosa y la velocidad del rayo.